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Cuando comencé a entrenar con Gastón acababa de pasar un largo periodo en cama. Apenas tenía masa muscular, no podía ni andar deprisa, y estaba mareada casi todo el tiempo. Ahora tengo un buen tono muscular, hemos desbloqueado mi diafragma y los mareos son cada vez más infrecuentes y suaves, aunque aún queda trabajo por hacer. No me atrevía a hacer casi nada, pero gracias a la paciencia y profesionalidad de Gastón, voy recuperando el ritmo normal de la vida.

Antes de empezar a entrenar con Gastón sólo era capaz de correr un minuto seguido. Hacía intervalos de 1 minuto andando y 1 corriendo y hacer eso durante 15 minutos me parecía todo un logro. Una vez comenzados los entrenamientos con Gastón todo cambió: el fondo, la distancia, la flexibilidad… Ahora ya puedo decir que he terminado 4 medias maratones, más de media docena de trails de montaña, para culminarlo con finalizar la 101 km de La Legión. He conseguido mucho más de lo que jamás había creído posible así que animo a todos a sumar 1 minuto más 1 minuto, hará llegar donde queráis y confiando en Gastón.

Cuando comencé a entrenar con Gastón estaba cansada de dar clases programadas y perder peso pero no tener tonificado nada. No me veía haciendo cantidad de cosas que hago hoy y antes no me veía capaz. Ahora las amigas me preguntan qué hago para estar tan bien y me siento mucho más ágil. Gracias a la caña que me dado Gastón me veo capaz de hacer cualquier actividad física y de superar cualquier reto y no sólo físico.