La deshidratación y el rendimiento deportivo

La deshidratación y el rendimiento deportivo es un aspecto a tener en cuenta para alcanzar los objetivos marcados. Además de una dieta y entrenamientos personalizados, hay que tener prestar atención a la cantidad de agua en nuestro cuerpo.

Como entrenadores a domicilio en Málaga y teniendo en cuenta las altas temperaturas que se alcanzan en estos meses, recomendamos mantener durante todo el día una adecuada hidratación. No se trata únicamente de ingerir agua durante el entrenamiento, consiste en mantener los niveles de hidratación estables durante todo el día.

¿Qué le ocurre a nuestro cuerpo ante la falta de agua?

Es una realidad que cuando practicamos ejercicio físico se produce en nuestro organismo una deshidratación progresiva. Si no incluimos en nuestro plan nutricional una ingesta de líquidos adecuada estaremos poniendo en riesgo nuestra salud. Y es que la falta de agua no solo afecta al rendimiento, también aumenta las probabilidades de que suframos una lesión mientras hacemos deporte.

Como sabemos, el sudor es el mecanismo que tiene nuestro cuerpo para mantener la temperatura corporal. Cuando practicamos ejercicio esta aumenta y gracias al sudor baja. Si nuestro cuerpo está deshidratado será imposible regular la temperatura. Esto puede llegar a provocar diferentes sensaciones según el grado de deshidratación. ¡Hablemos en porcentajes!

Con el 2% de deshidratación la energía que nuestro cuerpo invierte para regular la temperatura disminuye. Al 3% comenzamos a notar los calambres, los mareos aparecen y nuestra temperatura puede elevarse hasta los 38º.

A partir de ahí, las consecuencias son mucho más graves. Entre el 4% y 6% pueden aparecer cefaleas y contracturas graves. Por encima de ese porcentaje entramos en riesgo de golpe de calor y fallo multiorgánico.

¿Cómo mantener los niveles de hidratación?

Como personal trainer y expertos en nutrición insistimos en la importancia de ingerir al menos dos litros de agua diarios, independientemente de que practiquemos o no deporte. Evidentemente nuestro cuerpo es sabio y tenemos que escucharlo. Ante la sensación de sed debemos hidratarnos y en días de calor mucho más.

 ¡No cuesta nada ir acompañados de una botella de agua! Si la vemos, beberemos.

Otras fuentes de hidratación son las frutas, verduras e infusiones. Por ello, como entrenadores personales hacemos hincapié en la importancia de establecer dietas personalizadas afines a cada cuerpo.

Contar con un entrenador personal en Málaga que se preocupe por el tipo de alimentación e hidratación nos ayudará a cuidar nuestra salud y evitar riesgos ante la falta de hidratación además de mejorar nuestro rendimiento físico y cumplir nuestras metas.


Autor: Entrenador a Domicilio

Edición y diseño: La Factoría Creativa

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